Desde ahora en España y Venezuela las riñas de hermanitos han cambiado dado al auge de estas nuevas expresiones:
De gritarse clásicos como “Me cago en la leche coño” o “joder”
El lenguaje ahora acoge frases despectivas de alcurnia y caché como son:
Reyna: ¡Cerdo Fascista!
Hugito: ¿Por qué no te callas?
Reyna: ¡Macaco! ¡¡Perro del Imperio!!
Pues ojala y en realidad Huguito hubiera aprendido desde chiquito mínimo a como comportarse en público.